Bonos convertibles y defecto información supone que se trate de un producto complejo en los términos de la Ley del Mercado de Valores , de hecho la documentación que el Banco Popular confeccionó para su comercialización lo calificaba como un producto destinado a inversores mayoristas pero pese a ello procedió a la venta, en muchas ocasiones, a minoristas dirigiendo una recomendación personalizada a sus clientes para ofertarles la compra de los bonos convertibles.
Es claro que el Banco Popular al comercializar los Bonos convertibles y defecto información, que es esencial referido al riesgo del producto, desconociendo los clientes que contrataban un producto complejo, sin remuneración garantizada y con un riesgo elevado.
Debemos tener en cuenta que, Banco Popular al comercializar los Bonos Convertibles tenía un deber de diligencia y transparencia, que no cumplió al no informar con claridad suficiente para que los clientes fueran capaces de tomar la decisión de inversión con conocimiento de causa. Por otro lado no debemos olvidar que las entidades financieras deben valorar los conocimientos y la experiencia en materia financiera del cliente, para precisar qué tipo de información ha de proporcionársele en relación con el producto de que se trata, y en su caso emitir un juicio de conveniencia o de idoneidad los riesgos que implica el producto o servicio de inversión ofertado
Los Bonos convertibles son un producto complejo en los términos de la Ley del Mercado de Valores , de hecho la documentación que el Banco Popular confeccionó para su comercialización lo calificaba como un producto destinado a inversores mayoristas pero pese a ello procedió a la venta, en muchas ocasiones, a minoristas dirigiendo una recomendación personalizada a sus clientes para ofertarles la compra de los bonos convertibles.
Es claro que el Banco Popular al comercializar los Bonos convertibles ofreció defecto de información, defecto que es esencial referido al riesgo del producto, desconociendo los clientes que contrataban un producto complejo, sin remuneración garantizada y con un riesgo elevado.
Debemos tener en cuenta que, Banco Popular al comercializar los Bonos Convertibles tenía un deber de diligencia y transparencia, que no cumplió al no informar con claridad suficiente para que los clientes fueran capaces de tomar la decisión de inversión con conocimiento de causa. Por otro lado no debemos olvidar que las entidades financieras deben valorar los conocimientos y la experiencia en materia financiera del cliente, para precisar qué tipo de información ha de proporcionársele en relación con el producto de que se trata, y en su caso emitir un juicio de conveniencia o de idoneidad los riesgos que implica el producto o servicio de inversión ofertado